Barranco de las Tejas

Barranco de las Tejas

26.2.2019

Bellísimo barranco con una aproximación larga pero poco dura y una progresión tremendamente divertida, con pocos rápeles, aunque altos, y muchísimos destrepes y pasos interesantes, y con un lecho de roca precioso. 

Propuesto por Antonio "el Pollero" dentro de sus salidas a la montaña de los martes, el grupo estaba formado por él mismo, Paco Doña, Marco, Ozeluis, Carmen Pedresqui, Ana (Bokerona), María Ruano, Sebas (de Nerja), Salvador y yo mismo.

Tras quedar en los del Túnel primero, y luego liarla el Doña cambiando el punto de encuentro a la rotonda de Canillas de Aceituno, hicimos la combinación de coches: tres abajo y uno arriba, con los petates. Como Marco sigue con su rodilla chunga, tardamos casi dos horas en la aproximación, sin prisa y disfrutando del precioso paisaje.

El barranco es muy seco, aunque tiene algunas pozas evitables. Es también muy abierto y poco resbaladizo, pero mejor no despistarse. Arranca con un primer rápel de unos 10 metros destrepable por la izquierda, al que le sigue un imponente y bello rápel de algo más de 30 metros (37 según la ficha), el más alto del recorrido. Alterna algunos rápeles con largas progresiones salvando importantes alturas con destrepes y toboganes. Tremendamente divertido aunque hay que ir con cuidado.

Hay al menos otros dos altos y preciosos rápeles, y varios encadenados, con poca altura, y que terminan en un pasamanos.

Cuando crees que la progresión en cuerda ha acabado llegas a una zona con varias pozas evitables mediante un pasamanos en la izquierda que termina en un corto rápel, aunque Salvador lo pasó evitando las pozas.

Precioso barranco, con unos 8 horas de recorrido, contando la aproximación, en nuestro caso, a paso muy tranquilo y disfrutando de la belleza de las rocas en el lecho del barranco y de un día con una temperatura estupenda. Para repetirlo antes de que apriete el calor. 

Muchísimas gracias a Antonio por esta estupenda convocatoria y al grupo por tan buen día. Hoy todo el grupo estaba muy compenetrado, así que cuando he mirado el reloj no me podía creer que lleváramos tantísimo tiempo allí dentro, lo que es señal de que he disfrutado como un niño chico. ¿Cuándo volvemos? :) :) :)

Estaban justo en la puerta de la salida por la Fájara. Han adelantado su primavera :) :) :)